Entre los TRES ARROYOS: El Parque Cabañas

Son veinticuatro hectáreas arboladas a apenas 40 cuadras del centro de la ciudad, con una laguna artificial, pileta pública, parque de juegos infantiles, sector de parrillas, sanitarios, campo de deportes, circuito aeróbico, un arroyo que lo atraviesa agregando, por si es necesario un elemento más pintoresco aún. Un remanso para pasar los momentos de ocio, lugar a donde los tresarroyenses acuden, especialmente los fines de semana, con el tradicional equipo de mate, o más aún, desde la mañana a compartir una parrillada en familia o con amigos. Sitio obligado para la “Fiesta de la primavera”, momento en el que no sólo los estudiantes, sino público del más variado acude a los espectáculos que se presentan, y a disfrutar de la naturaleza, con una excusa más que valedera.
Ángel López Cabañas adquirió los terrenos en 1927, con el fin de comenzar la forestación del predio y darle a la ciudad una opción ya ecológica, en aquel momento. Con los años se construyo una catarata artificial, un zoológico con palomar, que ya no funcionan; un puente interior, laguna artificial, caminos interiores quebrados (al estilo europeo) y estacionamiento. El diseñador fue Luis Meister (el mismo que estructuró la Plaza San Martín) botánico y paisajista, además de jardinero, cuidador y horticultor. Se plantaron 470 clases de árboles y arbustos provenientes de todas partes del mundo, que el tiempo y descuido de administraciones anteriores dejaron perder, pero que se están recuperando con éxito. El Parque fue propiedad de López Cabañas hasta 1968, año en que fue vendido al municipio, con un valor casi simbólico, y el dinero recibido fue donado a instituciones locales de bien público. En los años ´70 se formó una Comisión del Parque que se ocupa hasta hoy de su mantenimiento y mejoras. A través de la Municipalidad también se están realizando obras de pavimentación de la Avenida Libertad, que lleva hasta el lugar. Sería interesante tener la opción de mejorar la infraestructura y seguridad como para poder utilizar sus instalaciones también de noche, al estilo de los parques de otras ciudades, con ferias y fogones. Pero para ello, hace falta un estudio de factores delicados y una promoción destacada.